jueves, 27 de mayo de 2010

Hijo de la luz y de la sombra

Caudalosa mujer: en tu vientre me entierro.
Tu caudaloso vientre será mi sepultura.
Si quemaran mis huesos con la llama del hierro,
verían que grabada llevo allí tu figura.

Con el amor a cuestas, dormidos y despiertos,
seguiremos besándonos en el hijo profundo.
Besándonos tú y yo se besan nuestros muertos,
se besan los primeros pobladores del mundo.

MIGUEL HERNANDEZ

Joan Manuel Serrat recién ha lanzado su último trabajo discográfico "Hijo de la luz y de la sombra" basado en poemas de Miguel Hernández. Esto no tendría nada de extraordinario; pero Serrat es Serrat, y decidió lanzarse en una aventura que a estas alturas del partido ha sido muy arriesgada para él, ya que el LP que grabó hace casi 40 años con los poemas de Hernández tuvo mucho que ver tanto con su carrera, como con la imagen poética que -muchos que no conocíamos a Hernández- nos hicimos de él.

El cantautor se ha tomado muy pocas libertades a la hora de adaptar los textos. En todo caso, es un derecho ganado a pulso tras más de cuatro décadas de ejercer como el gran difundidor de los poetas condenados al olvido por la dictadura franquista. En mi caso personal -de no ser por Serrat- difícilmente habría conocido los textos de poetas como Antonio Machado, Miguel Hernández, Rafael Alberti, Gabriel Celaya, León Felipe y José Agustín Goytisolo.

Para un país que aún no se recupera del todo de los traumas heredados de la dictadura franquista, la figura del poeta sigue siendo incómoda. De hecho, los cargos en base a los cuales la dictadura envió a la cárcel a Miguel Hernández aún no han sido retirados oficialmente, y uno de los poemas seleccionados para este trabajo -Canción del esposo soldado- fue usado como prueba de su afiliación política.

A pesar de los pesares, Serrat asumió este trabajo como si fuese el último. Las arrugas y las cicatrices en la voz del cantautor son meras condecoraciones a la hora de asumir la voz de un poeta que de niño pastoreaba cabras. "Rumbos perdidos a flor de tango" nos cantaba -un Serrat más tarreS que Serrat- en uno de sus trabajos anteriores, pero en "Hijo de la luz y de la sombra" la urgencia de los textos solo permite el ritmo de tango para cantarle al hambre.

Por el cinco de enero,
cada enero ponía,

mi calzado cabrero
a la ventana fría.

Y encontraban los días,
que derriban las puertas
,
mis abarcas vacías,
mis abarcas desiertas
.

Nunca tuve zapatos,
ni trajes, ni palabras
:
siempre tuve regatos,
siempre penas y cabras.

Me vistió la pobreza,
me lamió el cuerpo el río

y del pie a la cabeza
pasto fui del rocío
.

Por el cinco de enero,
para el seis yo quería,

que fuera el mundo entero
una juguetería
.

Y al andar la alborada
removiendo las huertas

mis abarcas sin nada,
mis abarcas desiertas
.

Ningún rey coronado,
tuvo pie, tuvo gana

para ver el calzado
de mi pobre ventana
.

Toda gente de trono,
toda gente de bota
s
se rió con encono
de mis abarcas rotas.....


A cien años de su nacimiento, la voz de Miguel Hernández sigue más vigente que nunca, "aventando sus versos redondos y frescos como si hubieran sido escritos ayer y aquí" según palabras del propio Serrat. Todavía hay millones de niños que sueñan con zapatos y con comida. Todavía hay millones de "niños yunteros". Los niños de la calle se cuentan por cientos o miles de millones.

Serrat no pudo ser más certero a la hora de seleccionar los grandes temas en la obra del poeta, y conscientemente ha asumido no dejar fuera textos en los que Miguel Hernández deja bastante claro su compromiso: Escríbeme a la lucha/ siénteme en la trinchera/ aquí con el fusil tu nombre evoco y fijo/ y defiendo tu vientre de pobre que me espera/ y defiendo tu hijo./ Es preciso matar para seguir viviendo/ Un día iré a la sombra de tu pelo lejano/ y dormiré en la sábana de almidón y de estruendo/ cosida por tu mano.


jueves, 6 de mayo de 2010

¿Dónde estás Roque?

“Todas las felicidades cuestan muertos”, dice Silvio Rodríguez en referencia al martirio de Víctor Jara. Eso lo sabemos bien en El Salvador. Nuestro Poeta Nacional Roque Dalton comparte el destino de miles de salvadoreños -la mayoría de ellos muy humildes- asesinados durante la guerra civil. La tumba de Roque -igual que la de miles de desaparecidos- sigue siendo un lugar indefinido en nuestro mapa. Lo único que sabemos es el nombre de los verdugos, ellos saben que sabemos ... y pretenden que no les importa.

Victor Jara -cantautor chileno asesinado el 16 de septiembre de 1973, a pocos días del golpe de estado perpetrado por Pinochet y compañía- tuvo hace un año su segundo funeral, en este caso un funeral de estado encabezado por la entonces presidenta Michelle Bachelet y la viuda de Jara, Joan Turner. La primera vez -
hace casi 37 años- Joan Turner depositó los restos de Jara de manera casi anónima en el cementerio de Santiago. A pesar de todo, sus seres queridos tuvieron durante 36 años el consuelo de conocer la ubicación de la tumba, algo que nunca han tenido los familiares de Roque Dalton.

Supongamos que el estado salvadoreño decidiera realizar funerales de estado, o edificar un mausoleo para Roque Dalton. En primer lugar sería necesario conocer la ubicación de los restos del poeta para exhumarlos y analizarlos por medio de un equipo forense. En ese hipotético escenario, los verdugos de Roque Dalton deberían revelar ya sea la ubicación de los restos, o el sitio exacto en donde el cadáver de Roque fue abandonado a su suerte con la aparente intención de que el olvido lo borrara, que la nada lo devorara.

Tras el revuelo provocado por las demandas -legítimas- de los hijos del poeta, parece poco probable que -al menos en el futuro inmediato- Roque Dalton tenga funerales de estado, o un mausoleo, o que el estado salvadoreño celebre un acto en el que se pida perdón por su asesinato. Ciertamente la obra del poeta es patrimonio de El Salvador, pero seguramente cualquier litigio sobre propiedad intelectual debería favorecer a sus herederos. Por otra parte, resulta paradójico reconocer a Dalton como nuestro Poeta Nacional, reclamar la obra como patrimonio de la sociedad salvadoreña en su conjunto, y al mismo tiempo mostrar semejante indiferencia con la búsqueda de la verdad.

"La verdad puede resultar incomoda, pero el olvido mata", escribe Juan Antonio Martín Pallín en su artículo "No se Puede enterrar el olvido" publicado el 08/10/2008 en El País. Por su parte Joan Manuel Serrat, en el artículo "El Segundo entierro de Victor Jara", escrito para rendir homenaje al cantautor chileno afirma -A quien dice: Dejad en paz a los muertos, les respondo: ¿están los muertos en paz? ¿Estamos en paz con ellos?- la respuesta debería ser más que obvia.

¿Dónde estás Federico? pregunta Natalia Junquera en un artículo publicado el 20/12/2009 en El País, en el que describe la búsqueda infructuosa de los restos del gran poeta español asesinado en medio de la barbarie de la guerra civil española. ¿Dónde estás Roque? preguntamos nosotros 35 años después. Los verdugos de Roque Dalton -sus propios ex-camaradas guerrilleros- llegaron mucho más lejos que los asesinos de Federico García Lorca y los asesinos de Victor Jara, lo cual es decir bastante. Federico fue sepultado, y algún día -más temprano que tarde- sus restos serán encontrados.

El insoportable pasado de los verdugos es un perro fiel que ni los quiere ni los deja. Es una especie de insoportable pesadez del ser -gracias Kundera-. En el año 2100 y después, los salvadoreños continuarán leyendo a Roque Dalton. Su figura no puede menos que seguir creciendo con pasos de gigante. Una mancha insignificante en pie de página -impresa con letras diminutas- en la biografía del poeta será todo lo que la historia guardará de sus verdugos...... eso si el olvido no los borra, si la nada no se los traga.......

viernes, 16 de abril de 2010

Stand and Deliver

"Stand and Deliver" es el título de un film que nos presenta a un tipo de héroe poco común en las producciones de Hollywood. En general es más fácil encontrar largometrajes, teleseries, o documentales dedicados a personajes como Al Capone, o peores -que sin duda los hay- que una producción similar dedicada a Isaac Newton o a James Maxwell. Sin embargo, las excepciones son las que confirman la regla.

La primera vez que tuve oportunidad de ver esta película -al margen de que corresponde al genero de ficción- tuve una sensación de deja-vu. Jaime Escalante, el personaje principal personificado por Edward James Olmos, es un profesor de cálculo -precisamente una de las invenciones de Newton- en Garfield Highschool, una de las escuelas secundarias de más bajo rendimiento del sur de California. Intentar enseñar cálculo diferencial e integral, en una escuela en la que operan pandillas, es algo así como Misión Imposible I, II, y III juntas. Al menos eso es lo que advierten los colegas a Escalante.

Jaime Escalante, fallecido a finales de marzo pasado, alcanzó notoriedad y reconocimiento a partir de los años 80, al lograr incrementar el número de estudiantes de Garfield que lograban superar la prueba A.P. de Cálculo, desde cero hasta unos 30 estudiantes en 1982, y más de 70 en 1987. Los resultados de la generación de 1982 -retratada en el film- eran tan inusuales, que las autoridades del departamento de educación decidieron repetir la prueba, sospechando fraude. El reconocimiento a su labor vino incluso de fuentes tan inesperadas como el entonces presidente Reagan, de quien se dice que en algún momento tuvo la idea de suprimir el Departamento [Ministerio] de Educación de EE.UU.

Lo que está en el centro del argumento, es la situación que generalmente experimentan los maestros al trabajar con estudiantes problemáticos, dentro de escuelas en las que todo es escaso, incluyendo -por supuesto- los buenos maestros. Un personaje -como Escalante- que hace caso omiso de los pretextos y que decide hacer algo para cambiar la situación, generalmente no es visto con buenos ojos por el resto de maestros, especialmente si tiene éxito, ya que de esta manera deja sin excusas a sus colegas.

- Si quiere mejorar los promedios.... cambie el nivel económico de esta comunidad. Uno no puede enseñar logaritmos a analfabetas -argumenta la jefa del Departamento de matemáticas, en una de la discusiones más agrias que han sido recreadas en el film- Estos chicos llegan aquí con una educación elemental. Cada maestro aquí presente está haciendo lo que puede.
- ¡Yo no! -dice Escalante- ¡yo podría enseñar más!
-¿Qué necesita, Sr. Escalante? -pregunta el director.
- ¡Ganas! -responde Escalante, en español, a una audiencia en la que no todos entienden el significado de la palabra- Lo que necesitamos son ganas.

Esta escena me da vueltas en la cabeza cada vez que se reinicia el ritual de nuevo ingreso en la UES -incluyendo las tomas perpetradas por los encapuchados- Es difícil intentar un ejercicio decente de la docencia sin sentirse aludido por ese dialogo demoledor de Jaime Escalante. Sin embargo, sería insensato no reconocer el peso que las limitaciones socio-económicas ejercen tanto en el desempeño, como en las expectativas de los estudiantes. De hecho, el éxito del programa de enseñanza de cálculo de Garfield Highschool declinó debido a la falta de continuidad del apoyo institucional. Al fin y al cabo los estudiantes de Garfield Highschool no provienen de Beverly Hills.

En la UES se ha mantenido durante varios años un programa para jóvenes talentos de matemáticas, el cual ciertamente no ha estado exento de controversia dentro del campus. A inicios de la actual administración, incluso se llegó a temer la cancelación del mismo, ya que se trataba de uno de los proyectos más emblemáticos de la administración de la Dra. María Isabel Rodríguez. A pesar de los pesares, en días recientes hemos conocido la noticia de que Nahomy Hernandez -una de las estudiantes participantes en dicho programa- ha sido aceptada por el MIT (Massachusets Institute of Techhnology). Con lo que representan los costos de un programa de élite en una universidad con recursos limitados, más vale que Nahomy efectivamente pueda estudiar en el MIT, y que algún día sus logros puedan tener algún impacto en nuestra sociedad.

En la Facultad de Ingeniería de la UES se sabe desde hace unos 25 años que aproximadamente solo la cuarta parte de los estudiantes de nuevo ingreso aprueban las asignaturas del primer año. Ciertamente que en los cursos de matemáticas y física -que los estudiantes toman durante el primer año- se estudia el cálculo y otros descubrimientos de Newton, de manera que algunos de los obstáculos -o pretextos como preferiría llamarles Escalante- que los enseñantes deben superar son bastante similares a los que encontró Escalante en Garfield: estudiantes en desventaja por su extracción social -incluyendo sus prerrequisitos educativos- y una institución en donde las cosas buenas son preciosas y escasas.


viernes, 26 de marzo de 2010

El Diablo en el Paraíso

Los pajes son coronados
los reyes friegan el piso
el diablo en el paraíso
y presos van los soldados
se perdonan los pecados
fusilamiento de jueces
en seco nadan los peces
será un acabo de mundo
cuando en los mares profundos
las arboledas florecen.

Los justos andan con grillos

y libres van los perversos
noventa cobres un peso
seiscientos gramos un kilo
los futres andan pililos
los gordos son raquíticos
brincaba un paralítico
sobre un filudo machete
ocho por tres veintisiete
divide un matemático.

VIOLETA PARRA

"Dios es búlgaro, pero el árbitro era francés"
HRISTO STOICHKOV

El diario italiano La Repubblica difundió el pasado 25 de marzo, imágenes de G. W. Bush en Haití dando la mano a ciudadanos haitianos y luego limpiando su mano en la camisa de Bill Clinton. Hay cosas que no cambian nunca, especialmente ciertas mañas -eternas- y limpiarse en otros [a sus espaldas] es una de las más célebres. Muchos salvadoreños amantes de la "viveza" sin duda darán la razón a G. W. Dar la mano a "haitianos pobres" bien podría ser considerado un gesto de simpatía, casi humanitario. Limpiarse en otro es ..... algo a la medida de un mentiroso emérito.

Este pecadillo de G. W. se podría categorizar como una nueva regla de lo que no hay que hacer, pero al revés: "Límpiate en otros, antes que ellos se limpien en ti". En manos de políticos inescrupulosos, esta acción es metáfora pura. En realidad, de acuerdo a Carl Sagan, esta regla, más bien es un caso especial de la denominada regla de hierro: "Haz a los demás lo que te plazca, antes que ellos te lo hagan a ti", pero por su aplicación en el campo de la acción política, la regla de las manos limpias, bien se merece una categoría especial.

En el mundo real, los códigos morales -aparentemente- han pasado a ser papel mojado, exceptuando aquellas reglas cuyo cumplimiento es de verificación difícil o imposible, como por ejemplo "Amar a Dios por sobre todas las cosas". ¿Como se puede probar que alguien cumple o no cumple esta regla? Pero cuando pasamos a reglas menos abstractas como por ejemplo "No matarás", resulta evidente -al menos para los violadores de las mismas- la necesidad de volver más compleja la interpretación de los códigos morales y legales, de forma que para algunos sea posible matar, y al mismo tiempo mantener el status de personas morales [personas decentes como decimos en El Salvador].

La BBC publicó hace pocos días el reporte especial "Diez mandamientos para América Latina", en donde se presentan 10 historias que exploran la imposibilidad de cumplir con algunas de estas reglas o mandamientos. La historia relacionada con el mandamiento "No matarás", se ilustra con el caso dramático de Samuel Gonzáles, un soldado salvadoreño -matar es difícil- confiesa Gonzáles, pero resulta evidente que es mucho más difícil no hacerlo.

Hace algunos años, el científico Carl Sagan, describió la dificultad de aplicar estas reglas o normas de conducta, como instrumentos efectivos de convivencia social. En el artículo "Las Reglas del Juego" que aparece en el libro "Miles de Millones", Sagan analiza la regla de oro, y otras normas de conducta. Los párrafos restantes están dedicados a comentar pasajes del artículo de Sagan, tratando de asumir un punto de vista salvadoreño. Finalmente, se ha agregado al repertorio la regla de las manos limpias, la cual seguramente no es una invención reciente, pero -hay que reconocerlo- no todas las generaciones tienen la oportunidad de presenciar una interpretación tan literal de la misma.

La Regla de Oro
"La norma más admirada de conducta , al menos en occidente, es la "regla de oro" atribuida a Jesús de Nazaret. Cualquiera conoce su formulación en el Evangelio de san Mateo del siglo I: "Todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros a ellos"."

La Regla de Plata
"La regla de plata es diferente: "No hagas a los demás lo que no quisieras que te hiciesen". Martin Luther King rindió tributo a Gandhi como primera persona en la historia que convirtió las reglas de oro o plata en instrumentos eficaces de cambio social. Pero incluso Gandhi tuvo problemas para conciliar el empleo de la no violencia con las necesidades de la defensa frente a quienes seguían reglas de conducta menos sublimes. Además las reglas de oro y plata resultaban totalmente inaplicables en la lucha de Mandela y los suyos en contra del Apartheid." Lo mismo podría decirse del caso salvadoreño.

La Regla de Bronce
""Paga el bien con el bien, pero el mal con justicia", dijo Confucio en parte en respuesta a la regla de Oro. Esta podría llamarse regla de Bronce: "Haz a los demás lo que ellos te hagan". Es la lex talionis, "ojo por ojo y diente por diente"." Ojo por ojo, y el mundo terminará ciego, comentó Gandhi.

La Regla de Hierro
"De acuñación inferior es la regla de hierro: "Haz a los demás lo que plazca, antes que ellos te lo hagan a ti". Esta regla parece ser el precepto tácito de los poderosos."

La regla de Hojalata
En el inframundo se encuentra la regla de hojalata: "Trata de ganarte el favor de los que están por encima de ti y abusa de los que tienes debajo". La versión salvadoreña sería: "las gallinas de arriba se cagan en las de abajo". Es el lema de los matones y los "enrollones" (en la acepción salvadoreña).

Nepotismo
"La otra regla corriente es: "privilegia en todo a tus parientes y haz lo que te plazca con los demás". Esta regla, conocida como nepotismo, es llamada por los evolucionistas "selección de parentesco"." La versión aplicada a la política salvadoreña sería: "privilegia en todo a los de tu partido y haz lo que te plazca con el resto".

La Regla de las Manos Limpias
"Límpiate en otros, antes que ellos se limpien en ti". Ya hemos mencionado que esta regla bien podría ser considerada un caso especial de la regla de hierro, sin embargo su universalidad la hace merecer mención aparte. A principios de la década de los 90, el juez italiano Antonio di Pietro se convirtió en celebridad mundial, cuando envió a la cárcel a cientos de funcionarios del gobierno italiano y ejecutivos del sector privado, como resultado de la denominada operación Manos Limpias que investigaba la corrupción en las licitaciones públicas. Cabe mencionar que incluso Silvio Berlusconi, fue investigado por di Pietro. Pero al final Berlusconi se limpió en otros.... En una maniobra digna del libro Guinnes de Records, el susodicho aprovechó la atención que el país entero prestaba a la semifinal del campeonato mundial de fútbol en 1994 -jugada entre Italia y Bulgaria- para lograr la aprobación, con los votos de su coalición, del decreto Biondi que quitaba poderes a los jueces. La sesión parlamentaria tuvo lugar mientras la Bulgaria de Stoichkov perdía la semifinal con la mano de un árbitro francés. Tras el triunfo de la selección italiana, en los medios italianos -que en porcentaje nada despreciable son propiedad de Berlusconi- durante varios días solo se habló de la clasificación italiana a la final del mundial. Cuando los políticos de oposición intentaron reaccionar, el asunto ya era ley de la república, y así como va el mundo, y como dice la canción de Violeta Parra, lo más probable es que el juez di Pietro termine preso. "Límpiate en otros -incluido el juez- aunque necesites una pequeña ayuda de un árbitro francés". Esa sería, más o menos, nuestra pequeña versión ilustrada de esta regla.


viernes, 5 de marzo de 2010

Ninguna Mentira puede durar por Siempre

"La verdad está siempre en el cadalso, y la mentira siempre en el trono".
Sin embargo, en ese cadalso se balancea el futuro.

MARTIN LUTHER KING, DISCURSOS.

Es imposible tapar el sol con un dedo, y sin embargo, algunos lo siguen intentando. Hoy por hoy, Monseñor Romero es el salvadoreño más universal, y en palabras de Ignacio Ellacuría: "con Monseñor Romero Dios pasó por El Salvador". Lo mismo ha ocurrido con personajes como Nelson Mandela, Martin Luther King o Gandhi. A excepción de Mandela, todos fueron asesinados en sus propios países. A excepción de Gandhi -y en menor medida de King- también es válido aquello de que "nadie es profeta en su tierra".

Hace pocas semanas tuve la oportunidad de ver el film "Invictus", que relata la etapa de la vida de Nelson Mandela que comienza con su liberación. En una de las escenas iniciales, el auto que conduce a Mandela desde la prisión pasa cerca de campos de futbol, en donde juegan muchachos negros que lo aclaman como héroe, y luego pasa frente a un campo de rugby, en donde practican jóvenes blancos -¿quién es?- pregunta uno de ellos -¡es el terrorista Mandela!- responde el entrenador. Esa y otras conversaciones que surgen entre los personajes de la minoría blanca retratados en el film, vuelven inevitable la tentación de trazar paralelos con la realidad -pasada y presente- de El Salvador.

Martin Luther King recorrió un camino similar. En el punto más álgido de su carrera dijo: "...Pero no es fácil tomar posición por la verdad y por la justicia. A veces implica frustrarse. A veces decir la verdad y tomar posición implica caminar por las calles con un peso en el corazón A veces implica perder el trabajo y ser objeto de la burla y el escarnio. Y puede implicar que un niño de siete u ocho años le pregunte a su papá "¿Por qué tienes que ir a la cárcel tanto tiempo?"

"......Todavía podemos cantar "We Shall Overcome!" (Venceremos) -repetía Luther King- porque Carlyle tenia razón "ninguna mentira puede durar por siempre". Venceremos porque William Cullen Bryant tenía razón: "La verdad, derribada por tierra, se levantará otra vez." Venceremos, porque James Russell Lowell tenía razón: "La verdad está siempre en el cadalso, y la mentira siempre en el trono". Sin embargo, en ese cadalso se balancea el futuro. Venceremos porque la biblia tiene razón "Cosecharás tu siembra"....

A pesar de los pesares, en EE.UU. se celebra -como una de las efemérides más importantes del año- el 15 de enero, día del nacimiento de Luther King. Debe ser un trago amargo para los sectores que conspiraron para hacerle la vida difícil. Pero, ni modo. En algún momento todas las sociedades son obligadas por las condiciones dinámicas de la realidad a hacer un mea culpa. EE.UU. lo hizo con King, y aparentemente El Salvador ya inició un proceso similar con Monseñor Romero.

Y no faltaba más, con la canonización como una posibilidad cada vez más fuerte, la asamblea legislativa -haciendo gala de una dosis notable de olfato político- reconoció que ya no vale la pena el intento de tapar el sol con un dedo. Así las cosas, durante la sesión del pasado 4 de marzo, la asamblea estableció -mediante decreto- el 24 de marzo, como día de Monseñor Romero. Llegaron tarde, pero algo es algo....

Desconozco si los habitantes -tanto de la mayoría negra, como de la minoría blanca- de Sudafrica ya tuvieron la oportunidad de ver el film "Invictus" en las salas de cine, o en los canales de TV de mayor rating, o en las ventas de DVD -legales o piratas-. El hecho es que los dueños de los medios en El Salvador ya decidieron que la mayoría de ciudadanos de este país todavía no estamos listos para ver el film "Romero". En algunos mercados municipales, ni siquiera los vendedores de DVD´s piratas se atreven a ofrecer esta película. Los mismos que se rasgan las vestiduras cuando hablan de libertad, practican una censura ideológica descarada.

No es ninguna sorpresa la irrelevancia con que la mayoría de medios de comunicación ha tratado la noticia del "Día de Monseñor Romero", rayando casi en un intento de volverla invisible. En La Prensa Gráfica, la noticia apareció en la página 28 (sección política), en la edición del 5 de marzo. En la versión electrónica del mismo periódico, la noticia no era visible, a menos que el lector interesado recurriera al buscador.

Tampoco sorprende la reacción del partido ARENA. No es para menos. Aceptar que Monseñor Romero es un santo, equivale a aceptar que durante 30 años han estado repitiendo mentiras acerca de esta historia, y en eso la derecha ha sido realmente coherente. Sin embargo, tal como repetía Martin Luther King: "ninguna mentira puede durar por siempre" ... Y al final todas las cosas se saben con el tiempo. El círculo se está cerrando, pero algunos [cada vez son los menos], insisten en tapar el sol con un dedo.


miércoles, 3 de marzo de 2010

Relatos de Viajeros

Hace un siglo, el explorador polar Ernest Shackleton dirigió una expedición para alcanzar el polo sur. Como resultado de aquel intento, la expedición estableció la marca de haber llegado al punto más al sur, y en consecuencia, a su regreso al Reino Unido fue recibido como héroe y recibió el título de Sir. En realidad la misión había fracasado, ya que Shackleton no logró llegar al polo Sur.

Shackleton estableció un campamento en Cape Royds, y desde allí se lanzó con tres acompañantes a conquistar el polo sur. A 180 km del polo, se vieron obligados a regresar debido a que las provisiones se les agotaban. Aparentemente, escogieron la ruta climática más favorable para regresar, ya que debieron abandonar algunas de las provisiones más estratégicas que habían almacenado en el campamento de Cape Royds.

Casi un siglo después, durante trabajos de restauración del refugio que sirvió de campamento a Shackleton, los restauradores encontraron un tesoro enterrado entre las rocas y el hielo, bajo las tablas que servían de suelo en las cabañas: 5 cajas de escoces (marca McKinlay ) y dos cajas de brandy. El Blog The Pour del New York Times, especializado en Whisky, Vino, Cerveza, y otros espíritus, hace un recuento de este hallazgo en su edición del 5 de febrero.

En realidad no sabemos el número de personas que participaban en la expedición, pero uno puede especular que
a lo mejor Shackleton no deseaba compartir su tesoro etílico con todo el mundo. Además, Shackleton había aceptado previamente las condiciones de disciplina de la Royal Navy. El final feliz de este capítulo de la historia, es qué el grupo Whyte & Mackay -dueños actuales de la marca original McKinlay- están intentando recuperar la receta de la mezcla original.

En otro episodio semejante -que me vino a la memoria después de leer el post de The Pour- recordé que en el capítulo CI de Moby Dick, Herman Melville menciona un hallazgo que le llamó poderosamente la atención en sus investigaciones acerca de las historias leviatánicas:

"...... Fue en ese capítulo titulado "Smeers" o "Grasa", donde me encontré una larga lista detallada de las provisiones para las despensas y bodegas de ciento ochenta balleneras holandesas, de la cual transcribo, según la traducción del doctor Snodhead, lo que sigue:

400,000 libras de carne
60,000 libras de cerdo de Friesland
150,00o libras de pescado
550,000 libras de galleta
72,000 libras de pan fresco
2,800 cuñetes de manteca
20,000 libras de queso Texel y Leyden
144,000 libras de queso (probablemente un artículo inferior)
550 ankers de ginebra
10,800 barriles de cerveza

......La cantidad de cerveza también es muy grande: 10,800 barriles. Como en esa comarcas polares solo era posible cazar durante el breve verano (de modo que todo el viaje de una de esas balleneras, no pasaba de tres meses) y como calculando 30 hombres para cada uno de los 180 veleros, tenemos en total 5,400 marineros holandeses, resultan precisamente 2 barriles de cerveza por cabeza durante el lapso de doce semanas, sin contar la discreta porción de esos 550 ankers de ginebra que le tocaba a cada uno.....

Pero no sigamos con esto; ya hemos dicho bastante para demostrar que los balleneros holandeses de hace dos o 3 siglos sabían darse muy buena vida....".

Esta anotación de Melville coincide con la conclusión de The Pour:
"In the age of steamer trunks and ocean liners, people packed big, even for exploration. No Tang for them!". Esto último, a propósito de la pregunta de Obama a los tripulantes de la estación espacial ¿todavía beben Tang allá arriba?

Por último, recuerdo que durante una visita de un escritor español [no estoy seguro si se trataba de Benjamin Prado], uno de los zares nacionales de la crítica literaria lo entrevistó, y en algún momento la conversación terminó en el callejón sin salida de las cosas realmente importantes en la vida, y el entrevistador tuvo la desventurada idea de incluir al buen Jack Daniels entre la lista de cosas prescindibles -momento joven- replicó el escritor español - con Jack Daniels no se meta.


martes, 16 de febrero de 2010

El Arte de Copy and Paste

Mucho antes del advenimiento de Internet, Umberto Eco -un estudioso de las palabras, de su significado y de las manipulaciones que por medio de las mismas puede ejercer el escriba- reflexionaba maravillado acerca de las posibilidades creativas de la función "copy and paste" que ya incorporaban los procesadores de palabra de mediados de los años 80. En "El Péndulo de Foucault", Eco sugería que algunos ejemplos memorables de plagio literario posiblemente podrían ser explicados mediante algún antepasado de la funciones copy and paste, y las no menos importantes search and replace:

"....con el programa adecuado hasta puedes hacer los anagramas, si has escrito toda una novela sobre un héroe sudista llamado Rhett Butler y una chica caprichosa que se llama Scarlett y luego te arrepientes, sólo tienes que dar una orden y Abu cambia todos los Rhett Butler por príncipes Andrei y las Scarlett por Natasha, Atlanta por Moscú, y has escrito la guerra y paz."

Con la irrupción de Internet en la vida cotidiana, la vida de los profesores se ha complicado y la de los estudiantes -creativos tecnológicamente- ha alcanzado un estado de ánimo inigualable en la historia. En la actualidad ni siquiera es necesario tomarse el trabajo de digitalizar, o peor aún - teclear- los textos. Hace pocas semanas, se desató un escándalo en Europa, tras hacerse públicas las acusaciones de plagio en contra de Helene Hegemann, una jovencita alemana de 17 años autora del libro Axolotl Roadkill, un best-seller con el cual alcanzó un nivel de celebridad bastante prematuro. Un blog cultural descubrió que Hegemann había hecho copy and paste con material de varios libros.

J.J. Millas, otro estudioso de las palabras, se quejaba en tono resignado, de que tanto él como Hemingway, tuvieran que cobrar sus textos por número de palabras: lo mismo un sustantivo, que un verbo, o un adverbio (que según Millas a cualquiera se le ocurre). Por ejemplo, con este texto, yo y mi estómago no saldríamos de nada, ya que a este punto apenas contamos con 341 palabras, incluyendo un número y varios barbarismos. En cambio -para los ladrones de palabras- completar las 4000 o más palabras exigidas para una columna digna de un periódico de cobertura nacional, es una tarea tan simple como quitarle un dulce a un niño [muy pequeño].

Por otra parte, es bastante problemático intentar penalizar a los estudiantes por practicar el arte del copy and paste, cuando frente a nuestras narices se dan ejemplos bastante descarados de ciudadanos "notables" que escriben columnas de opinión en las páginas editoriales de periódicos nacionales, y que a falta de inspiración no tienen mayor reparo en aplicar el copy and paste. Peor es constatar que los expertos en el arte de copiar en los exámenes, incluso pueden llegar a ser presidentes de algunos países.

A manera de ilustración, aquí está un ejemplo tomado de nuestra realidad. El lunes 15 de febrero apareció en la versión electrónica de El País, un artículo escrito por Pedro Cifuentes acerca de la reunión que sostuvo el presidente electo de Urugay, José Mujica, con empresarios de varios países. Para mi relativa sorpresa, al día siguiente me encontré con el mismo texto en las páginas editoriales de La Prensa Gráfica -tras haber sido sometido al proceso de copy and paste- dentro de un "ensayo" firmado por R. Castellanos.

Estoy seguro de que un buen profesor de composición -de secundaria- rechazaría un abuso semejante. Por otra parte, de un periódico serio se esperaría un rigor similar o superior al exigido en las buenas escuelas de periodismo. También sería deseable desempolvar los manuales de ética, en caso de que estos existan. De 13 párrafos del texto de Castellanos, 6 están basados casi completamente en el artículo escrito por Cifuentes. A Hemingway, que cobraba por número de palabras, no le agradaría mucho esta situación....



FUENTES
  1. Cifuentes, "Mujica Seduce a Empresarios", El País, 15 febrero 2010.
  2. Castellanos, "La Izquierda Inteligente de Mujica", La Prensa Gráfica, 16 febrero 2010.

lunes, 1 de febrero de 2010

La Rebelión de los Títeres

La relación entre el títere y el ventrílocuo, o entre el títere y el titiritero no es fácil. Tampoco está libre de conflictos la relación entre el títere y su creador. Ambos compiten ya sea por los aplausos, o por los favores que pueden ser ganados en sus actuaciones. Citando a J.J. Millas: "hay temporadas en que el muñeco es más listo que su dueño,... en las que el muñeco es el ventrílocuo". Desde el principio existe un conflicto de interés entre títere y dueño.

Otra fuente de conflictos se desata cuando el muñeco tiene la presunción de que su dueño lo puede desechar debido a la llegada de un títere nuevo equipado con accesorios más sofisticados, o cuando el desgaste acumulado por el uso excesivo lo vuelve inútil. Normalmente los títeres no actúan por iniciativa propia (de hecho ni siquiera levantan la mano si el dueño no lo ordena), pero tratándose de una situación en la cual el títere viejo ya es desechable, no queda otra alternativa que hacer a un lado el protocolo. Como botón de muestra tenemos la reacción de Woody, el personaje de Toy Story, tras enterarse de que va a ser reemplazado por un muñeco de última generación.

En fin, ya sea porque el títere es más listo que el dueño, o porque tiene sospechas justificadas de que podría ser desechado en la próxima temporada, el hecho es que -en tiempos recientes- compañías completas de títeres han abandonado a sus dueños y se han establecido por su cuenta (o al menos eso es lo que pretenden). Estoy seguro que los investigadores y estudiosos del arte se deleitarán elaborando artículos, estudios, y tesis doctorales, acerca de como -en este y en otros campos- la vida imita al arte y viceversa.

A pesar de todo, los títeres no siempre se rebelan intencionalmente en contra de sus dueños. A veces no cumplen los deseos de estos por problemas de comunicación. El hilo mediante el cual el titiritero controla al muñeco es frágil y se puede romper por abuso, o por mal cálculo. A veces los títeres asumen que conocen perfectamente lo que le conviene al dueño, y actúan por su cuenta. Otras veces, durante las decisiones cruciales, la línea de comunicación puede quedar obstruida, y en este caso los títeres pueden actuar involuntariamente en contra de los designios superiores:

Waldo Chávez Velasco relató durante una entrevista concedida en los años 90 a un periódico nacional, que mientras fungió como embajador salvadoreño ante organismos internacionales, su tarea casi única era votar siempre igual que el embajador de EE.UU. A veces -decía- un embajador gordo obstruía la línea de visión, y en varias ocasiones votamos involuntariamente en contra de la posición de EE.UU.

El caso de Pinocchio, es más complicado, y excepción hecha del gusto por las mentiras y las travesuras, en general se puede decir -a manera de ejemplo- que los motivos de muchos políticos son más primitivos que los del famoso buratino. Esto, si nos atenemos a las especulaciones en las que está basada la trama del film "Artificial Intelligence". Por otra parte, Pinocchio tenía un problema de transparencia: le crecía la naríz después de mentir, disfuncionalidad que para su fortuna, los políticos no padecen. En todo caso el conflicto de Pinocchio es con su creador. Incluso se podría decir que es debido a un problema de identidad. Y mejor hasta aquí dejamos este texto, ya que el ejemplo de Pinocchio está demasiado elevado para hacer analogías con los políticos salvadoreños.


jueves, 28 de enero de 2010

Todos los ciudadanos de a pie son iguales, pero se presume que no son "decentes".

A los pobres la ley se les aplica,
a los ricos se les explica.
TUCIDIDES

Las lecciones de ciudadanía solo las entienden a la perfección los que experimentan la parte práctica en primera persona. El resto es humo. Yo, por mi parte, recibí mi lección de repaso, este día 28 de enero por parte de amables instructores de la PNC, y el texto que sigue es el borrador de mi reporte.

Cuando me dijeron "contra la pared", me sentí igual que el resto de pasajeros del autobus de la ruta 2C que se encontraban en mi misma situación. Es decir: todos los de a pie somos iguales.

Reconocer que se deben tomar medidas para prevenir y reprimir la violencia social que nos abate, no debe confundirse con un cheque en blanco que flexibiliza los derechos ciudadanos, algo que Juan José Millas define como perversión ulterior del concepto de flexiseguridad. A ese paso, en un futuro no tan lejano antes de recibir una golpiza -o algo peor- de parte de los que nos deberían proteger, solo vamos a recibir como atenuante una flexiexplicación: es por tu seguridad.

Algo huele a podrido en una situación en la cual los daños colaterales solo golpean al ciudadano de a pie. De acuerdo a Platón, todas las percepciones de la realidad son incompletas, e imperfectas. En el caso de nuestra realidad se insiste en hablar continuamente -por ejemplo- del derecho de tenencia y portación de armas de fuego que tienen los ciudadanos "decentes" para defenderse de los criminales. Surge una pregunta inevitable en este caso: ¿quién acredita que un ciudadano es decente?

También y no por casualidad, muchos de nuestros ciudadanos "decentes" que practican el derecho que algunas constituciones otorgan irrestrictamente a todos sus ciudadanos de portar armas, también tienen el gusto por los autos polarizados. Esta situación de asimetría, según la cual una parte de la sociedad tiene el poder de auto-acreditarse como ciudadanía "decente", tiene como consecuencia lógica que el resto (es decir todos los ciudadanos de a pie) adquirimos un status de presunción de culpabilidad.

Esa es la otra conclusión de la lección de hoy: todos los ciudadanos de a pie son iguales (incluso ante la ley), pero se presume que no son ciudadanos "decentes".



martes, 5 de enero de 2010

En los Pasillos de la Muerte

Hace dos años caminé junto a mi padre por los pasillos de la muerte. Su estado de salud se había deteriorado en los últimos meses, y lo que se podía hacer sin hospitalizarlo, ya había sido hecho. Cuando lo ví el 24 de diciembre, le costaba respirar. Mi padre había salido de muchas situaciones duras, pero esta vez iba a ser diferente. Aquel 26 de diciembre, fuimos a consulta con el médico que lo había atendido durante más de quince años. Tras examinarlo, y ver las imágenes de las radiografías de sus pulmones, el Dr. Figueroa Avilés me explicó que sus pulmones estaban acumulando líquido. Lo primero era drenar este líquido. Esto significaba hospitalizarlo, y en nuestro caso particular, hospitalizarlo en el "Seguro". -Yo no quiero que me lleven al Seguro- me había dicho mi padre en repetidas ocasiones. Pero esta vez era diferente. Previendo lo peor, le pedí a Rosa, su mujer, la documentación necesaria en caso de que fuera necesario hospitalizarlo, y le pedí a ella que nos acompañara en la visita al médico. Cuando le explicamos la situación, él ni siquiera intentó oponerse. Su instinto de supervivencia pudo más que el temor a quedar en manos de la maquinaria del ISSS.

A eso de las cuatro de la tarde de aquel 26 de diciembre, nos presentamos en la entrada de emergencias del hospital general del ISSS. Rosa y yo, lo acompañábamos, pero solo era permitido un pariente por paciente en la sala de espera. Decidí esperar afuera, ya que Rosa era de más ayuda a su lado. De vez en cuando el vigilante me permitía entrar para ir a hablarle y darle ánimo, o llevarles algo de comer o beber, pero la espera se prolongó por casi 7 horas. Desesperados, empezamos a mostrar la nota del Dr. Figueroa Avilés, indicando claramente que el derrame pleural requería hospitalización inmediata; así como la radiografía que probaba el diagnóstico. Incluso logramos que uno de los médicos de turno accediera a hablar por teléfono con nuestro médico. Mostramos la nota y la radiografía a la enfermera que tenía la voz de mando, y esta, a su vez, la mostró a un burócrata con título de médico. Este nos explicó disgustado que nos habíamos saltado la cadena de controles internos de la institución (se refería al diagnóstico, exámenes, así como al seguimiento del paciente). A lo mejor esa es la explicación de las 7 horas de espera para ingresarlo. A lo mejor eso es lo normal. Al fin y al cabo otros corren peor suerte, ya que mientras esperábamos murió un hombre en la sala de espera sin haber sido atendido.

De mala gana iniciaron las revisiones de rutina con los médicos de turno. Recuerdo que entre los exámenes a que él fue sometido, estaba el electrocardioagrama. Su corazón fue bueno hasta el final, tanto desde el punto de vista biológico, como desde el lado que lo hacía diferente a tantos otros.. Superada la segunda barrera de burocracia, lo acompañé hasta una zona en que unas enfermeras le tomaron muestras de sangre, la temperatura, la presión y otras pruebas. A este momento, no recuerdo la razón por la cual yo estaba a su lado en lugar de Rosa. Luego me dieron una bata de hospital, y me indicaron que debía ponerle la bata para ingresarlo. Lo hicimos en los baños de hombres, los que son de uso público en la sala de emergencias. Finalmente después de las once de la noche, cruzamos juntos los pasillos de la muerte, yo impulsaba la silla de ruedas y seguí a una enfermera, mientras ella nos guiaba hasta el séptimo nivel. (El Dr. Figueroa Avilés, me explicaría la mañana siguiente, que los pacientes asignados al séptimo nivel eran considerados casi en cuidados intensivos)

El día siguiente pude visitar a mi padre por primera vez a la hora de almuerzo y su recuperación era notoria. Para entonces, ya le habían drenado el líquido de los pulmones, y respiraba con facilidad. Esto me hizo abrigar muchas esperanzas. Incluso, nos comunicamos por teléfono con mi hermana Ena. Sin embargo, los especialistas regresaban de vacaciones navideñas a eso del 3 o 4 de enero, y esto significaba que todo lo que podían hacer antes de esa fecha, era para mientras. Para el 31 de diciembre, mi vida giraba alrededor de las dos visitas diarias permitidas en el hospital, y aquel día, durante la visita de la tarde, le di de comer o al menos intenté convencerlo de aceptar un poco de alimento.

El deterioro final lo pude percibir después que nos dimos cuenta de que le habían fracturado un brazo. Estoy consciente de es realmente dificil manipular a un anciano, por su fragilidad, pero el hecho es que en el ISSS, intentaron no darse por enterados. También recuerdo que tuvimos un frente frío, y en el séptimo nivel dejaban las ventanas abiertas, y durante la peor noche de frío, le quitaron parte de su ropa de cama, él estaba indefenso. No hay duda que la suma de todas esas miserias complicó su estado. Su contacto con la realidad se volvió difuso, empezó a hablar de Arcadia, su madre, y no sé hasta que punto, también a conversar con ella. Hablaba de conejos aliñados para ir a comerlos a Las Delicias, su lugar de nacimiento, cerca de San Martín. También habló de sus desconfianzas cotidianas, esas penas que son como perros fieles, que ni nos quieren, ni nos dejan, y que siguen acosándonos fieramente hasta en la última hora.

Mi hermana había llegado el 1 de enero, y afortunadamente pudieron conversar en varias ocasiones durante las dos visitas diarias. Ella oró junto a él, aquel sábado 5 de enero, durante la visita del mediodía, en un momento en el cual yo ya me había derrumbado. Ese día, poco antes de la medianoche, mi padre perdió su última lucha, esa que todos vamos a perder algún día. Sin embargo, la burocracia del ISSS nos tenía reservado el último trago amargo. Cuando nos presentamos a la morgue a reclamar el cuerpo, el funcionario gris que nos atendió hizo gala de toda la soberbia con la que los burócratas aplastan al ciudadano común, especialmente cuando detectan que se enfrentan a personas indefensas, dispuestas a soportar malos tratos con tal de no entorpecer la gestión- en nuestro caso, recibir los restos mortales de mi padre. Tras -prácticamente- burlarse de Rosa por que ella no podía escribir correctamente su nombre, casi en la oscuridad, después de las 3 de la mañana, .... nos condujo al depósito de cadáveres, y de una patada abrió el compartimento en el que se encontraba mi Padre. Edwin, el hijo de Rosa, quien fue criado por mi padre, y que para todos los propósitos de la vida también es su hijo, estuvo a punto de lanzarse encima de ese burócrata miserable; pero por fortuna para todos, la cosa no pasó a más.

Tanta iniquidad no se explica exclusivamente por argumentos que ciertamente son válidos (la falta de recursos, medicinas, instalaciones, personal, etc.), pero son insuficientes para justificar estas realidades (las 7 horas en la sala de espera de emergencias, el brazo fracturado, la falta de especialistas durante períodos de vacaciones, etc.). Es una paradoja que a mi padre, quien arriesgó su vida -entre otras cosas- por participar en la fundación del sindicato del Ingenio de San Isidro a finales de los años cincuenta, le haya sido negado el derecho a una muerte digna, por burócratas que de seguro se sienten intocables por ser sindicalistas. Mi padre, que idealizaba tanto las luchas de los trabajadores, habría tenido serias dificultades para entender la conducta de estos "compañeros".

Todos vamos a morir algún día, y si somos suficientemente desafortunados, antes de partir vamos a recorrer en más de una ocasión los pasillos de la muerte de nuestros hospitales, y probablemente seremos tratados y maltratados como un número más, si no hacemos algo al respecto, antes de que llegue nuestra hora.